sábado, 13 de noviembre de 2010

Cuando las palabras fallan, la música habla

Aléjate de mi y hazlo pronto antes de que te mienta
Tu cielo se hace gris, yo ya camino bajo la tormenta.
Aléjate de mi, escapa ve que ya no debo verte
Entiende que aunque pida que te vayas, no quiero perderte

La luz ya, no alcanza.
No quieras caminar sobre el dolor descalza
Un ángel te cuida
Y puso en mi boca la verdad para mostrarme la salida

Y aléjate de mi amor
Yo se que aún estás a tiempo
No soy quien en verdad parezco,
y perdón no soy quien crees
Yo no caí del cielo

Si aún no me lo crees amor.
y quieres tu correr el riesgo
verás que  soy realmente bueno
en engañar y hacer sufrir
a quien más quiero

Aléjate de mi pues tu bien sabes que no te merezco
quisiera arrepentirme, ser el mismo y no decirte esto
Aléjate de mi, escapa, vete. Ya no debo verte
Entiende que aunque pida que te vayas no quiero perderte.

La luz ya, no alcanza.
No quieras caminar sobre el dolor descalza.
Un ángel te cuida.
Y puso en mi boca la verdad para mostrarme la salida.

Y aléjate de mi amor.
Yo se que aún estas a tiempo.
No soy quien en verdad parezco,
y perdón no soy quien crees
Yo no caí del cielo
Si aún no me lo crees amor. y quieres tu correr el riesgo verás que soy realmente bueno en engañar y hacer sufrir y hacer llorar a quien mas quiero...

Letra: Camila - Aléjate de mi 

sábado, 6 de noviembre de 2010

Hoy...

Buenos Aires 
Hoy la nostalgia conspiraba en mi contra y preparaba un certero golpe. Así pasó el día con una sensación de tristeza que no reconocí al primer momento, pero que ya me parecía sospechoso, no es la primera vez que se presentan estos ataques. Hoy fue diferente, hoy supe esquivar ese golpe con una precisión que para ser sincera, hay que mejorar; pero, lo esquivé… a decir verdad, lo transformé.

Fue raro, porque mientras respiraba hondo para no llorar, a mi mente venían millones de recuerdos, unos más nítidos que otros, unos más vigente que otros, pero todos con una historia y una sonrisa anexa que me hizo transformar la nostalgia en alegría. Suena raro, pero así pasó.  Así lo transformé y con eso me quiero quedar.

A pesar de que mi memoria no merece admiración, hay un pequeño espacio en ella en la que atesoro todos los momentos, sin fechas, sin horas, sin una marca en el calendario… Son sólo historias que están vivas para mi, y como si de un reproductor se tratara, justo hoy me impulsaron a escribir estas líneas.

Hoy me quiero quedar con los gritos en la montaña rusa…

Hoy me quiero quedar con esa estrella que tiene nombre…

Hoy me quiero quedar con la conversación en el frío mar…

Hoy me quiero quedar con tus palabras que siempre me hacen reaccionar…

Hoy me quiero quedar con todos los kilómetros recorridos...

Hoy me quiero quedar con tu sonrisa... 

Hoy me quiero quedar con sus manos entrelazadas... 

Hoy me quiero quedar con ese beso en  mi ciudad anhelada…

Hoy me quedo con todo y con esta sonrisa que se transforma cada vez más.